
Pobrecito blogsito, ya lo tenía muy abandonado. Pero esta vez no fue decidia para escribir, lo que ocurre es que la semana pasada estuve de vacaciones en el trabajo y por eso no me acerque demasiado a la compu. Y la semana anterior estuvo muy movida en el trabajo, así que tampoco tuve mucho tiempo que digamos. Qué mas da, pongámonos al corriente. Las vacaciones era algo que necesitaba urgentemente, y no porque estuviera cansado del trabajo, presionado o estresado, en realidad solo quería dejar a un lado las responsabilidades laborales para dedicarme por completo a resolver algunos dilemas sentimentales. Cuando estuve planeando los días de descanso hasta había pensado en salir de la ciudad, pero no quería sentirme sólo estando lejos de casa. Y es que hay dos situaciones que me quitan el sueño últimamente, la primera es un pleito del tamaño de la guerra del golfo entre mi hermana y mi papá, que por más que he querido mantenerme al margen, inevitablemente me veo envuelto, me preocupa y no puedo hacer nada al respecto. La segunda es de tipo amoroso, estoy en una encrucijada y no sé que carambas hacer, se ha tornado todo tan extraño que a veces pienso que es mejor que te rompan el corazón y no al revés. Después de todo, quién dijo que la vida es fácil. Se acabaron las vacaciones y me doy cuenta que no me sirvieron de mucho para resolver mis dilemas, ah pero eso sí, me dediqué a resolver algunos cosas que estaban pendientes por falta de tiempo, me pongo un 8.
Finalmente, el domingo salí hacia Monterrey en viaje de trabajo, y efectivamente no pudo pasar de eso, aunque la intención era divertirme y conocer un poco, al final el tiempo fue mi peor enemigo y no hice más allá de mi encargo. Ayer por la noche regresé muy cansado pero convencido de algo, las regias están bien buenas. Buena semana...
1 comentario:
tu diario:
...recuerdame...
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