martes, 27 de septiembre de 2005

Cuenta regresiva


Hoy por la noche iré al entrenamiento de basquetbol, puede sonar rutinario, pero precisamente hoy, se hará la selección de jugadores que irá al torneo de clubes. Soy realista y quizás no seré seleccionado ya que he faltado últimamente, sin embargo tengo algunos puntos a mi favor que he ganado durante los juegos de preparación. Dependerá mucho de lo fuerte que trabaje en la práctica de hoy, pero al final todo será como un volado pues mis probabilidades están en 50-50.

jueves, 22 de septiembre de 2005

Malitzin


Sirva este medio para desear un buen viaje a una buena amiga, compañera de muchas andanzas y aventuras. Que toda la buena vibra la acompañe en este nuevo capítulo en su vida. No hay adióses, solo hasta luegos (que trillado), y todo porque 500 años después, la volvieron a conquistar...

martes, 20 de septiembre de 2005

La piedrota


Que mejor que aprovechar los días del puente para recorrer nuevos caminos. La idea era que toda la banda jalara y pasar unos días memorables. Ni hablar no todos pudieron, pero los que sí, nos la pasamos de lo lindo. Y es que para mí, este era un recorrido que desde hace tiempo tenía ganas de hacer, quería recordar los viejos tiempos cuando mi papá nos llevaba a Tequisquiapan, y de paso, conocer la Peña de Bernal. Este monolito, esta considerado el tercero más grande en el mundo, con una altura de 288 mts. La palabra Bernal es de origen árabe y los españoles la usaban para denominar algún peñasco grande y alargado que se encontraba aislado ya fuera en un llano o en el mar. Antes de la llegada de los españoles, habitaron en las faldas de la peña algunos chichimecas, quienes consideraban este lugar como sagrado. Y cómo no, el simple hecho de caminar por la ladera te da una sensación de relajamiento total, claro, puede ser que te canses, pero al llegar a la cima y contemplar todo el valle a tu alrededor, el lugar se vuelve mágico. Desde luego que quiero volver, y espero que sea pronto.

lunes, 19 de septiembre de 2005

8.1 grados en la escala de Richter

Hace 20 años que ocurrió el temblor que destrozó la ciudad de México. Y 20 años después aún hay huellas de la tragedia. Un minuto de silencio por las víctimas...

Me he de comer esa tuna....


La noche del grito estuve con mis amigos en la plaza de la delegación Tlalpan, dando y recibiendo arrimones y pisotones como lo habíamos pronosticado. Un poco de música de Oscar Chávez para amenizar la noche, aunque no tanta comida como en otros años. No pasó de unos elotes y pambazos que ni siquiera probé, pero el agua de jamaica me fue aclarando la garganta para el momento estelar de la noche, el viva Hidalgo...viva México. Por supuesto que el mejor ensayo de cuerdas vocales fue cuando recibimos al delegado sustituto, a la voz de corrupto! corrupto! Una vez que nuestra mexicanidad llegó a tope, los mariachis se arrancaron con su mejor repertorio dedicado a la patria, los juegos pirotécnicos reventaban por encima de nuestras cabezas, y los árboles se encargaban de que no pudieramos contemplar más allá del resplandor. Nos batimos en serpentina, confeti y espuma, pequeña guerra de 8 personas, donde nadie salió ileso y solo nos faltaron las velitas para parecer pastel de quinceañera. Después un par de fiestas, una en casa, donde el mezcal amenazó seriamente con dejar tirados a todos. La segunda, de gorrones (como buenos mexicanos) con baile y tequila. Al tequila ya estoy acostumbrado, pero hace mucho que no bailaba tanto (y eso que no fueron más de 10 canciones). Me la pase tan bien ese día que solo me queda hacer una pregunta: ¿qué sigue en el calendario de festejos?

martes, 13 de septiembre de 2005

Ojeras


Tarde pero seguro, me uno al unísono de Mé-xi-co Mé-xi-co Mé-xi-co. Hace casi una semana, nos lanzamos al Azteca a ver la goleada a Panamá, partido sin sufrimiento pero mucha diversión. Lástima que ni Daniel ni Ángel pudieron acompañarnos, tal vez podamos corear juntos los goles en Alemania. Mañana les compartiré alguna imagen de ese día.
El viernes por la noche fui a la fiesta de una prima, y en principio no tenía muchas ganas de ir pero al final acepté. Y vaya que valió la pena asistir, mucha cerveza y vodka gratis, pero sobre todo, harta población femenina. El saldo, una gran borrachera, Denisse, y la primer desvelada hasta las 5:30 am.
El sábado el cansancio me llegaba hasta las rodillas, y a pesar de ello, la fiesta de mi primo Héctor en mi casa fue inevitable. Me hubiera conformado con las mañanitas y el brincolín, pero Daniel me convenció de ir al festejo de Iliana. Por supuesto que también valió la pena, el doble que el viernes. Al final el día se extendió nuevamente hasta las 5:30.
El domingo debió ser el descanso, pero la invitación de Danielo a ver el clásico, me puso las pilas otra vez. Después un café inolvidable por la noche. Esta vez no habría mucho desvelo pero si la desmañanada del lunes. Sólo 4 horas y media de sueño.
Al final creo que sólo quedaron ojeras, las de mi rostro por olvidarme de mi almohada, y los árbitros que nos robaron otro clásico, cuántos van?

martes, 6 de septiembre de 2005

Muchos años después...


Pobrecito blogsito, ya lo tenía muy abandonado. Pero esta vez no fue decidia para escribir, lo que ocurre es que la semana pasada estuve de vacaciones en el trabajo y por eso no me acerque demasiado a la compu. Y la semana anterior estuvo muy movida en el trabajo, así que tampoco tuve mucho tiempo que digamos. Qué mas da, pongámonos al corriente. Las vacaciones era algo que necesitaba urgentemente, y no porque estuviera cansado del trabajo, presionado o estresado, en realidad solo quería dejar a un lado las responsabilidades laborales para dedicarme por completo a resolver algunos dilemas sentimentales. Cuando estuve planeando los días de descanso hasta había pensado en salir de la ciudad, pero no quería sentirme sólo estando lejos de casa. Y es que hay dos situaciones que me quitan el sueño últimamente, la primera es un pleito del tamaño de la guerra del golfo entre mi hermana y mi papá, que por más que he querido mantenerme al margen, inevitablemente me veo envuelto, me preocupa y no puedo hacer nada al respecto. La segunda es de tipo amoroso, estoy en una encrucijada y no sé que carambas hacer, se ha tornado todo tan extraño que a veces pienso que es mejor que te rompan el corazón y no al revés. Después de todo, quién dijo que la vida es fácil. Se acabaron las vacaciones y me doy cuenta que no me sirvieron de mucho para resolver mis dilemas, ah pero eso sí, me dediqué a resolver algunos cosas que estaban pendientes por falta de tiempo, me pongo un 8.
Finalmente, el domingo salí hacia Monterrey en viaje de trabajo, y efectivamente no pudo pasar de eso, aunque la intención era divertirme y conocer un poco, al final el tiempo fue mi peor enemigo y no hice más allá de mi encargo. Ayer por la noche regresé muy cansado pero convencido de algo, las regias están bien buenas. Buena semana...